Lo primero de todo, ¿hablamos de tu piel?

Puede que a simple golpe de vista parezca sencilla, ¿verdad? Seca, grasa, normal, mixta… Pero tenemos que decirte que ¡nada más lejos de la realidad!

Tu piel está compuesta por tres capas: la epidermis, la más externa, y la dermis e hipodermis, las más internas, respectivamente. Cada una de ellas, a su vez, están formadas por subcapas, que contienen un sinfín de células y estructuras que la conforman y determinarán el estado de tu piel.

Queratinocitos, lípidos, glándulas, vasos sanguíneos, y ¡mucho más!

Sin pretender darte una clase de anatomía en este momento, ¿ves lo compleja que es tu piel? Si, además, tienes en cuenta que es el órgano más grande de tu cuerpo, cuya función principal es protegerte de las agresiones externas, ¿no crees que realmente merece una atención especial?

En iMstant estamos seguros de que ¡sí! Pero sigue leyendo que te contamos todos los entresijos.

Entonces, ¿qué tipo de piel tengo?

Existe una clasificación muy generalizada, en la que se determinan unas características comunes, que te permitirían saber cuál es tu tipo de piel. Estas son las tipologías de piel y sus características más habituales:

• Piel normal. Como su nombre indica, sin ninguna peculiaridad especial o diferencial. Presenta una textura regular y sin imperfecciones
• Piel sensible. Más reactiva, es decir, propensa a reaccionar a estímulos externos, que se traduce en rojeces, picores, tirantez… Así pues, tiende a presentar cierta fragilidad. Si tu piel es sensible tenemos un artículo dedicado a este tipo de pieles delicadas aquí, en donde además de hablar de ellas, hablamos de perder el miedo a utilizar cosméticos en esta tipología de piel.
• Piel seca. Muy deshidratada, con sensación de tirantez y aspereza. Presenta una mayor descamación, picores e incluso enrojecimiento, y es más propensa a agrietarse. En casos de sequedad extrema puede presentar un aspecto escamoso. Por todo ello, tiene mayor riesgo de sufrir infecciones.
• Piel atópica. En este caso estamos hablando de una piel que padece una enfermedad conocida como dermatitis atópica. Presenta características tanto de una piel seca, como de una sensible.
• Piel grasa. Presenta un exceso de producción de grasa por parte de las glándulas sebáceas. Su apariencia es aceitosa, brillante y húmeda. Es habitual que también tenga los poros más dilatados y granos. ¿Tu piel es grasa? Entonces te recomendamos que leas el artículo sobre las claves de la piel grasa aquí, en el cual hablamos sobre cómo cuidarla y qué productos cosméticos elegir. 
• Piel mixta. Tiene características tanto de piel seca como de grasa, dependiendo de la zona. Seguro que has oído hablar alguna vez de la “zona T”, ¿verdad?

Llegados a este punto, viene la pregunta estrella: ¿con esta clasificación es suficiente?

Pues la respuesta es ¡no! Porque un análisis de tu piel, a nivel profesional, nunca se reduciría a estas simples características. ¡NUNCA!

En un diagnóstico cosmetológico profesional, se determina mucho más que la tipología de la piel, porque al igual que cada persona es única, tu piel también lo es. ¡No lo olvides nunca!

Por eso, en iMstant creemos que es muy necesario que, además de determinar parámetros básicos, también se tengan en consideración otros más específicos. Y, ¡espera! No solo de la piel, sino incluso del entorno.

Todo para estipular y entender cómo es tu piel y su comportamiento, así como detectar sus carencias y problemáticas. Hidratación, grasa, textura, arrugas, cambios de coloración de la piel (discromías), enrojecimiento, uniformidad, luminosidad, imperfecciones, daño profundo acumulado, sensibilidad, humedad… Una larga lista, cuyo objetivo es definir a la perfección tu piel y, por tanto, ofrecerle aquello que realmente necesita.

Ya sabes, aquello que, si pudiera hablar, te pediría. Entonces, ¿no crees que merece ser escuchada?

Ahora, ¿a qué te estás preguntando cómo puedes escuchar a tu piel?

Pues, como en iMstant creemos firmemente en la importancia de darle a tu piel lo que realmente pide y necesita, hemos desarrollado una la tecnología que nos permite escuchar lo que quiere decirte

Se trata de iMstant Scan4D, la primera aplicación de diagnóstico cosmetológico. Dinos, ¿has oído hablar ella?

No te preocupes que ¡te lo contamos! Esta aplicación escanea tu piel, gratis, con un simple selfie. En menos de un minuto detectamos qué problemas presenta tu piel, como manchas, arrugas, rojeces, … y podrás ver el daño acumulado y las imperfecciones en 4D.

Y así, de forma sencilla para ti, escuchamos todo lo que tiene que decirnos y te proponemos un diagnóstico preciso y exclusivo, para ti, para tu piel.

¿Y luego qué?

¡Luego obramos la magia! Porque con la cosmética personalizada iMstant tendrás un tratamiento cosmetológico a medida, ¡solo para ti! Creamos tu propio producto, exclusivo y único como tú, con los activos que tu piel necesita y a las concentraciones adecuadas.

Porque, simplemente, nos gusta escuchar todo lo que tu piel tiene que decirnos.

Resumiendo…

Ahora que conoces la complejidad de la piel, la precisión de un diagnóstico profesional (que tiene en cuenta mucho más que su tipología) y, también los beneficios que puede aportarte la cosmética personalizada, déjanos preguntarte:

¿Te atreves a escuchar lo que tu piel quiere decirte? Si te animas a realizar el diagnóstico, nos encantará que nos cuentes tu experiencia en los comentarios.

Y si tienes dudas, ¡escríbenos! Nuestro equipo de expertos cosmetólogos te acompañará durante todo el proceso de diagnóstico si así lo deseas, a través de una consulta online.

Quiero analizar mi piel